El plan de los de 5º era una incógnita: Nadie sabía quién fue Rambo. Pero tras una explicación y la correspondiente excursión inicial (alcanzar el bosque no fue tarea fácil para todos) comenzó la operación de camuflaje. Miguel B. y Pablo B. fueron los más rápidos, y alcanzaron la base cuando el vigía prácticamente estaba empezando a ejercer. Luego se complicó más la cosa: Gonzalo G. no hacía más que cubrirse con la capucha, Pablo M. buscaba cuestas cada vez más complicadas, Pablo M-S consiguió deshacerse de la camiseta que siempre le traicionaba, Ignacio C. no se molestaba en cubrirse la cara, y claro, era cazado una y otra vez. Iñigo R. andaba rezagado, pero se puso las pilas y al final alcanzó la meta hasta dos veces. Y Pedro del O. batió todas las marcas, bajando por una cuesta de vértigo. Tras una exploración por la zona y la charla que a algunos les faltaba, emprendimos el regreso con la merienda en el pensamiento de todos: Nos la habíamos ganado.
